Hoy habría cumplido 71 años el gasteiztarra Paco Gorostiza, quien falleció el pasado febrero. Cuando han transcurrido tres meses de aquella pérdida, su amigo y Celedón de Oro Jose Mari Bastida "Txapi" ha querido recordarnos la figura de aquel hombre polifacético. Desde Celedones de Oro queremos agradecer a Txapi su trabajo mientras nos sumamos a todas las muestras de admiración hacia Gorostiza.
Ahora, en mayo de 2017, el día 3, Paco Gorostiza hubiera
cumplido 71 años si una muerte repentina no se hubiera cruzado en su camino el
día de Santa Águeda de este mismo año. Ese mismo día 5 de febrero, a la
tarde, un miembro de la Junta de Celedones de Oro me comentó: habrá que
escribir sobre Goros en nuestro blog. No era Celedón de Oro, pero...
Y ahora, pasados tres meses, con la mente más serena, llega el momento de escribir. Efectivamente, Francisco Antonio Gorostiza Aberasturi no era Celedón de Oro. Era la viva personificación de aquel Celedón que apareció el año 1923 en las primeras aleluyas de la revista de su nombre con el texto: Celedón llega a Vitoria procedente de la Gloria, que inspiró a nueve vitorianos para que años más tarde hiciesen real esa bajada. Sí, Goros era ese Celedón, alegre y a la vez buen hombre que disfrutaba haciendo felices a los demás.
Ricardo Saéz de Heredia me comentaba al día siguiente, poco antes de acudir al funeral celebrado en la iglesia de San Juan de Judimendi, que había compartido cuerda con él en la Escolanía de Tiples del Conservatorio que dirigía Dimas Sotés. La afición a la música le venía ya desde niño.
Y ahora, pasados tres meses, con la mente más serena, llega el momento de escribir. Efectivamente, Francisco Antonio Gorostiza Aberasturi no era Celedón de Oro. Era la viva personificación de aquel Celedón que apareció el año 1923 en las primeras aleluyas de la revista de su nombre con el texto: Celedón llega a Vitoria procedente de la Gloria, que inspiró a nueve vitorianos para que años más tarde hiciesen real esa bajada. Sí, Goros era ese Celedón, alegre y a la vez buen hombre que disfrutaba haciendo felices a los demás.
Ricardo Saéz de Heredia me comentaba al día siguiente, poco antes de acudir al funeral celebrado en la iglesia de San Juan de Judimendi, que había compartido cuerda con él en la Escolanía de Tiples del Conservatorio que dirigía Dimas Sotés. La afición a la música le venía ya desde niño.
Recordé que hace pocos años, el
2014, se celebraron
unos actos con motivo del 75 aniversario de la fundación de
esa formación musical. Encontré la fotografía y allí estaba en primera fila,
con el txistu, muy cerca de José Manuel Bedia que tantos años tocó con él como
compañero de cuadrilla de blusas y de otros avatares.
Paralelamente, aprendió a tocar
el txistu y, enseguida, a participar en actividades relacionadas con nuestras
tradiciones. Casualidades de la vida, murió el día de Santa Águeda y, en su
víspera, había estado departiendo, antes de ir a casa, con los compañeros de su
grupo que salían de ronda.
Precisamente, una de las fotos
más antiguas que existen de él como txistulari, es saliendo con un coro de
Santa Águeda.
Amante del folklore, entró en el
grupo de danzas Oldarki, llegando incluso a bailar. Hay que decir que casi
todos los txistularis que tocamos en aquel recordado grupo, hicimos nuestros
pinitos de danza.
De aquella época, una fotografía
publicada en el Boletín de Información Municipal nos recuerda una actuación que
tuvo con Oldarki en Santiago de Compostela, el año 1965, con motivo de una
peregrinación provincial.
En la fotografía, tapa al
Celedón de Oro Manolo García
de Andoin, director del grupo y atabalero, que
estaba junto a él. Su relación con él, pasó de la de amistad del grupo a la
laboral, ya que entró a trabajar en el taller de modelos que regentaba nuestro
también recordado Manolo.
También trabó mucha amistad con
otro txistulari muy amigo de Manolo, José Luis Fenández “El Zapa”, Celedón de
Oro 1976 a título póstumo. La viuda de éste no faltó al funeral, acudiendo en
silla de ruedas, manifestando a todo el que se le acercaba que ya estaría
tocando junto a su marido allí donde estén los hombres buenos.
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| Foto: Alberto Shommer Koch (1969)/ATHA |
Juntos saldrían muchos años de
blusas en la cuadrilla Los Desiguales, pero, sobre todo, tocarían el txistu
para cualquier grupo de danzas que se lo pidiese o cualquier acto benéfico.
Eran así.
En 1971, la Diputación Foral de
Álava convocó la provisión de la plaza de miñón-txistulari 2º. Paco Gorostiza
ganó el puesto donde permanecería durante 36 años. Como pieza obligada, tuvo
que interpretar el minueto Otzoal. Como curiosidad hay que decir que
esta obra fue una de sus preferidas para interpretar en las numerosas
ceremonias religiosas a las que tuvo que acudir durante su vida.
Se da la circunstancia de que
fue el último miñon-
txistulari ya que cuando se convocaron las siguientes
plazas, en las que entraron los que serían durante largos años sus compañeros,
Jesús Moraza Zárate y Eduardo López de Alda Eguinoa, él cesó como miñón pasando
a ser administrativo al igual que los nuevos miembros.
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| Foto: José Luis Barroso/AMVG |
Durante tantos años, se
produjeron numerosas actividades y anécdotas.
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| Foto: Fondo Archivo Territorio Histórico de Álava |
Muy importante fue la
celebración en 1985 del cincuenta aniversario de la Banda de Txistularis de la
Diputación Foral de Álava.
Con ese motivo se celebraron a
lo largo del año diversos actos de distinto tipo: conferencias, mesas redondas,
conciertos, grabación
de un disco conmemorativo. Entre ellos, un homenaje en el
Teatro Principal a los miembros de la banda, tanto los que la integraban en ese
momento como a los componentes antiguos supervivientes.
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| Foto: Fondo Archivo Territorio Histórico de Álava |
Entre
las fotos curiosas, está ésta en la que el Dalai Lama aparece en el medio de la
Banda junto a
“Goros” en la visita que realizó a nuestra Ciudad en abril de 1997.
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| Foto: Fondo Archivo Territorio Histórico de Álava |
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| Foto: Fondo Archivo Territorio Histórico de Álava |
La
interpretación del Zortziko “Alava” por la Banda Provincial de Txistularis,
Clarineros y Atabaleros, a las nueve de la mañana del día de San
Prudencio, siempre ha sido uno de los
actos más emotivos de las fiestas de nuestro Patrón.
Esta
fotografía realizada tras la escucha del zortziko el
año 2007 tiene un especial
significado. Era una especie de despedida a dos de los miembros de la Banda,
Jesús Moraza Zárate y Francisco Gorostiza Aberásturi. Ambos se jubilaban ese
año. En el caso de “Goros”, nada más terminar las fiestas. Había nacido, como
ya he expuesto, un tres de mayo, en la calle Herrería, 61 años antes.
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| Foto: Fondo Archivo Territorio Histórico de Álava |
A pesar de estar jubilado, como amante de las tradiciones, siguió
asistiendo a este acto como espectador.
Así se puede apreciar en esta imagen de 2009 donde aparece en la parte
superior, el segundo por la izquierda.
Otro
aspecto que también hay que destacar , es la labor que desarrolló en pro del
txistu en Legutiano (Villarreal de Álava).
En 1973, el profesor de la escuela, Próspero Ariz, y el párroco, Iñaki Oregui, comenzaron a dar a varios alumnos las primeras nociones de música y txistu. Fue el inicio del grupo Laguntza de gran importancia en la vida cultural de esa Villa alavesa. Al poco, Gorostiza comienza a colaborar con el grupo, pero en 1976 no puede acudir por lo que, ante la marcha también de Próspero Ariz, se cuenta con un txistulari de Otxandiano, José Miguel González de Audicana.
En 1977, la Diputación Foral de Álava, por medio del Ayuntamiento de Legutiano asume mandar a uno de sus miembros, Paco Gorostiza, como profesor del grupo.
En 1973, el profesor de la escuela, Próspero Ariz, y el párroco, Iñaki Oregui, comenzaron a dar a varios alumnos las primeras nociones de música y txistu. Fue el inicio del grupo Laguntza de gran importancia en la vida cultural de esa Villa alavesa. Al poco, Gorostiza comienza a colaborar con el grupo, pero en 1976 no puede acudir por lo que, ante la marcha también de Próspero Ariz, se cuenta con un txistulari de Otxandiano, José Miguel González de Audicana.
En 1977, la Diputación Foral de Álava, por medio del Ayuntamiento de Legutiano asume mandar a uno de sus miembros, Paco Gorostiza, como profesor del grupo.
Así
comenzó una relación que fue más allá de lo
La
presencia de Eugenio Arratibel, del pueblo de Larrea, en el funeral, me trajo a
la memoria una tradición en Barrundia de gran importancia en el folklore alavés
de la que Eugenio es uno de sus principales mantenedores. Todos los años, el
día 4 de julio, los vecinos de Larrea se trasladan a la cercana localidad de
Hermua para celebrar la denominada fiesta del Barte con la obligación de llevar
txistulari y bailar un Aurresku.
A partir de 1988, tras la muerte de Iñaki Pérez Viñegra, fue nuestro recordado
Gorostiza el txistulari que durante largos años realizó esa tarea.
Y... ¡Qué decir
de su actividad en las fiestas de la Blanca! Sería imposible de resumir en un
sólo artículo todo lo que desarrollaba
en el Día del Blusa, en las prefiestas y
en las fiestas en sí.
en el Día del Blusa, en las prefiestas y
en las fiestas en sí.
Pero quiero hacer especial hincapié en
esos actos que
pasan desapercibidos. Esos actos como la misa o visita al cementerio el Día del Blusa, esa misa o ese aurresku del día del blusa veterano o... esos Auroros que el domingo anterior a las fiestas recorren las hornacinas de las calles del casco antiguo de la Ciudad.
Otro acto muy especial para Paco en fiestas era esa subida delante de la imagen
de la Virgen Blanca por la plaza de su nombre, tocando con el txistu la
biribilketa Ya vienen los Blusas haciendo mención a ellos mismos y a los
que portan y acompañan a la Patrona de la Ciudad.
Mención
especial merece un grupo de txistularis que se montó en torno suyo dispuestos
siempre a acudir donde fuera necesario y que optaron por llamarse Gorostizaren
lagunak.
Precisamente
con ellos estuvo en la víspera de Santa Águeda, horas anes de su fallecimiento.
Este grupo tiene como local de ensayo la
sede de la Sociedad Buena Voluntad, precisamente donde también desarrollaba
hace años una gran labor otro txistulari, Celedón de Oro fallecido en 2005,
Feliciano Sáenz Villafranca.
Al
hablar de esa Sociedad de Buena Voluntad, hay que
El nombre de Chetti provenía de la unión de los nombres Chema (Blasco) y
Tito (Aldama), este último hace años fallecido. Al dejarlo Tito, se incorporó
Arturo Beloqui. Posteriormente, volvería Tito a actuar con Arturo, ante la
imposibilidad de poder
Texto: JOSÉ MARÍA BASTIDA “TXAPI”
Fotos sin pie: Varias colecciones particulares
Fotos sin pie: Varias colecciones particulares
Emocionante recuerdo a Paco. A buen seguro que este año, el día 5 de agosto, sobre las 7:50 de la mañana, cuando la imagen de la Virgen Blanca llega a la plaza de su nombre,la biribilketa "Ya vienen los blusas" sonará de forma especial en homenaje a Goros.Y yo estaré, como todos los años, allí para acompañarle. Gracias Txapi por este emocionante recuerdo!!!!
ResponderEliminarJesus PM