|
Juan Carlos Abascal |
El amigo Juan Carlos Abascal nos ha enviado otro trabajo, para que podamos publicarlo en este rincón. Lo hacemos con verdadero gusto.
En esta nueva ocasión, volvemos a Valdegobía, tras las huellas de una supuesta aparición de la Virgen María.
Juan Carlos Abascal adiskideak beste idazlan bat bidali digu, argitara dezagun. Gustuz egiten dugu, bai horixe.
Oraingoan Gaubeako lurraldetik zehar egiten dugu txango historiko interesgarria, Ama Birjinaren ustezko agerpen baten atzetik.
=============..==========
|
Batxikabo |
En el verano de 1.931 a
pocos meses de iniciada la II República (14 de Abril), fueron muy sonadas las
supuestas apariciones de la Virgen en este lugar y que tras muchas procesiones
y rezos, fue desmontado el supuesto engaño por mozos de Villanañe y Espejo,
quienes a golpes desalojaron a la gente allí reunida y talaron los pinos donde
supuestamente se aparecía la Virgen. Con los restos del altar los mozos bajaron
a Espejo, donde reorganizaron un nuevo altar y colocaron a modo de bufa un cartel que decía: “La Virgen de Petras, Cansada del monte, Ha bajado a la
Ciudad”
Así contada la historia
es una forma muy sencilla de resumir lo acaecido, pero profundizando y hablando
con gente más o menos implicada o testigos de aquellos hechos, hay que resumir
los hechos que ocurrieron viendo los favorables y los contrarios a dicha
aparición.
Hoy aparte del recuerdo
de lo acontecido, queda la roca en la que supuestamente se aparecía la Virgen y
en la que aún se puede apreciar sus oquedades quemadas por las velas que se
ponían en la misma en honor de la Virgen de Petrás.
Y también en lo más profundo queda la duda de si realmente apareció.
Virgen de Petras:
Aparición en Espejo.
|
Batxikabo |
Un muchacho de familia
oriunda del pueblo cercano de Bachicabo, llamado José Luis Barrio, de unos 14
años de edad, y mientras pastoreaba un pequeño hato de ganado, como no podía
ser menos cuando se trata de apariciones de la Virgen que siempre se aparece a
pastorcillos, dijo habersele aparecido la Virgen cerca del manantial de Petrás.
En cosa de días, las gentes de buena fe le dieron crédito a la noticia y
empezaron a reunirse en torno a la roca de Petrás, junto al vidente a la espera
del hecho milagroso de ver aparecer a la Virgen. En principio eran personas
llegadas desde los pueblos próximos, pero poco a poco fueron uniéndose gentes
llegadas de Bilbao, Vitoria y Miranda de Ebro, y hay quien recuerda en Espejo
la llegada desde de Madrid de autobuses para ir en peregrinación hasta el sitio
de Petrás.
Varios curas párrocos de
la zona, principalmente D. Félix Alesón párroco de Espejo y D. Ildefonso,
párroco de Barrio, consideraron que convenía ordenar esta concurrencia de
fieles y con su tutela organizaron comitivas camino de Petrás, rezando el
rosario y las letanías de costumbre.
En estas circunstancias, se unieron otros videntes que también veían a la
Virgen, entre ellos otro de Bachicabo, Ignacio Orruño, y hasta seis o siete más
de otras localidades del Valle, quienes decían ver la Virgen también.
Contexto de las
apariciones
En primer lugar hay que
analizar el contexto en el que tuvo lugar la supuesta aparición de la Virgen en
el término de Petras, de ahí su nombre Virgen de Petras, muy cerca del
manantial de agua así también llamado y que históricamente suministra el agua
al pueblo de Espejo.
|
Ezkioga |
Coincide esta aparición
en el tiempo, también con las apariciones de la Virgen de Ezkioga en Junio de
1.931 en el pueblo de Ezkioga (Gipuzkoa), sin olvidar la exaltación de los
milagros de Fátima y de Lourdes. El hispanista católico irlándes Walter Starkie
visitó Ezkioga cuando las apariciones estaban en su momento de máximo auge y
dedicó un capítulo entero de su libro Spanish Raggle-Taggle a los sucesos de
Ezkioga. Después de analizar las historias que le contaron y de ver los hechos
que allí ocurrían, concluyó bastante convencido que grupos derechistas y
tradicionalistas estaban utilizando los sucesos de Ezkioga como herramienta
política en su lucha contra la laica Segunda República Española, que se había
proclamado dos meses antes de iniciarse las apariciones. Algunos de los
mensajes que supuestamente había dado la Virgen a los videntes hablaban de una
inminente guerra.
En Espejo pudo suceder
otro tanto ya que el ambiente político era muy malo con los republicanos muy en
contra de lo religioso. Hubo dos bandos irreconciliables en el tema de la
aparición: los que estaban convencidos de que así eran y se dejaron llevar por
motivos religiosos y económicos; y los que estaban convencidos de que era un
engaño o no lo querían creer y se llevaron por motivos antirreligiosos, pero
hubo en este grupo como veremos personas e instituciones que estuvieron en
contra por motivos no sólo religiosos como también económicos. Los mismos
motivos distintas motivaciones.
A Favor de la Aparición
de la Virgen de Petrás:
Lógicamente priman en primer
lugar en los motivos religiosos en esta supuesta aparición de la Virgen:
- el vidente de Batxikabo, quien decía ver la Virgen, y posteriormente otros
videntes y creyentes.
- El cura párroco entonces del cercano pueblo de Barrio, D. Ildefonso, fervoroso
siguiente de la Virgen de Petrás, y D. Félix Alesón, párroco de Espejo, quienes
organizaban procesiones hasta el lugar, de forma muy rimbombante con
crucifijos, monaguillos, etc…
- La feligresía en especial, mencionando expresamente a las hermanas Barredo
del pueblo de Espejo, reflejadas en el cuento El Tercer Milagro por Pedro
Morales Moya en su libro titulado Al Aire Libre-Cuentos Alaveses, y quienes
durante años después del desmontaje continuaron yendo al lugar a rezar a la
Virgen.
En segundo lugar no hay
que olvidar los motivos económicos.
Los lugares donde se aparecen las vírgenes, se revalorizan económicamente y son
objeto de especulaciones inmobiliarias. Véanse Fátima o Lourdes y los negocios
inmobiliarios y comerciales que alrededor de estas apariciones se han
realizado.
Ya había gente pensando en levantar un edificio para venerar a la Virgen y en
Espejo ir pensando en levantar hoteles, fondas, etc…. Las hermanas Barredo
mencionadas no eran ajenas a ello, por ser las idealistas, pero su entorno sí y
además ser propietarias de muchas fincas en Espejo.
En contra de la Aparición
de la Virgen de Petrás
Nos encontramos
principios o motivos antirreligiosos. Se estaba en plena república y aunque
declarada aconfesional, realmente fue anticlerical con un odio extremo a los
curas. Así los jóvenes en especial, hacían mofa y escarnio de los seguidores de
la Virgen de Petras en el pueblo de Espejo.
Unos lo hacían por
motivos personales. Estaban dos jóvenes de Espejo acusados de una violación
cometida justo antes de la República, en tiempos de la Dictadura de Primo de
Rivera, y que tenían inquina a D. Ildefonso, cura de Barrio, quien impulsó la
denuncia por violación. Dichos jóvenes pagaron entonces con cárcel el supuesto
delito cometido. El día de la refriega en Petrás que acabó con las apariciones,
D. Ildefonso y su feligresía volvían en procesión después de rezar ante la
Virgen de Petras atravesando el monte hasta llegar a la carretera. La comitiva
tenía que pasar bajo la peña a cuyos pies brota la fuente que llaman de “El
judío” a la entrada del pueblo de Barrio. Estos jóvenes de Espejo les esperaron
en lo alto de la peña, y se dispusieron a tirar piedras al cura y acompañantes
con ánimo de asustarles e impedirles el paso al pueblo. D. Ildefonso dio un
paso adelante y con los brazos en cruz, se arrodilló y gritando hacia arriba a
los atacantes les conminó a que le mataran a él solo y dejaran al resto de
acompañantes en paz. Esta actuación sobrecogió a los jóvenes de Espejo quienes
dieron marcha atrás en sus intenciones.
|
Angostoko Andra Mari |
Pero también nos
encontramos que desde la propia institución eclesiástica del valle,
concretamente el Santuario de Nuestra Señora de Angosto, estuvo en contra de
dar veracidad a esta aparición, y lo hizo por motivos religiosos propiamente y
económicos.
Hay que tener en cuenta que la aparición de la Virgen de Petrás si se
demostrase u oficializase iba en contra de la Virgen de Angosto, quien nunca se
apareció como la de Petrás, sino que lo que apareció en Angosto fue una imagen
de una virgen que luego daría nombre al lugar y a ella misma. Sería para los
Pasionista de Angosto ver como la devoción de la gente cambiaba de Virgen y con
ello también sus donaciones, testamentos, etc…Motivos económicos tampoco le
faltaban para ello como se puede imaginar.
El enfrentamiento eclesiástico entre los rectores del Santuario de Angosto y
los fervientes defensores de la Virgen de Petrás, encabezados por el párroco de
Barrio no podía hacerse evidente ni público.
Un fraile mayor de
Angosto me desveló que efectivamente los frailes de Angosto estaban en contra
de Petrás, pero que no podían entrar en discusión o peleas directamente con los
curas de Barrio y Espejo, que mantenían buenas relaciones con el obispo de
Vitoria, Monseñor Mateo Múgica , no cómo ellos que dependían de su orden. Los
frailes de Angosto acudieron a Rodrigo Hipólito de Varona Guinea, padre del
actual señor de Varona, solicitando su ayuda por haber sido la familia
benefactora de Angosto desde tiempos inmemoriales. Recordar que en 1.886 cuando
quedó destruido el convento de Angosto por un incendio los frailes se alojaron
en la Casa de Franciscanos de Espejo, a excepción del prior y otro, que lo
hicieron en la casa torre de los Varonas.
|
Barona sendiaren jauregia |
También fui informado por
el actual señor de Varona, Rodrigo María de Varona y Beltrán de Salazar, de que
efectivamente su padre envió a mozos de Villanañe a Petrás para reventar las
apariciones, cuadra así las dos versiones que dicen que si fueron de Villanañe
o fueron de Espejo. Fueron jóvenes de ambos pueblos los de Espejo por
republicanos y por la inquina a D. Ildefonso y los de Villanañe mandados por el
Señor de Varona para proteger a Angosto, los que pusieron punto y final a las
apariciones de la virgen en Petrás.
Fin de las apariciones
Un atardecer, cuando la masa de fieles estaba rezando el rosario
ante la roca, a la espera de que se produjera la aparición, ese grupo de mozos,
irrumpió en la explanada y la emprendió a golpes con los devotos de Petrás,
para que desalojaran la zona. Arrancaron las flores y ramajes que rodeaban el
hueco abierto en la roca donde se suponía que aparecía la virgen. Hubo alguna
resistencia y se liaron a palos y puñetazos para disolver a la feligresía allí
congregada.
Los mozos bajaron a Espejo ramas y flores y montaron un falso
altar en el ventanal de una casa, justo donde arranca la carretera de Barrio y
colocaron el cartel con la letrilla: La Virgen de Petrás, cansada del monte, ha
bajado a la Ciudad”.
La Guardia Civil inicio un procedimiento de interrogatorios para
conocer el alcance de la reyerta e informar sobre la verosimilitud o falsedad
de las apariciones. Desfilaron
por el cuartelillo de Espejo los que decían ver a la Virgen, que “hábilmente
interrogados” tuvieron ocasión de desdecirse. Aun así el vidente de Bachicabo,
José Luis Barrio, se mantuvo en sus trece durante muchos días, hasta que acabó
desdiciéndose de sus visiones.
Pese a todo, las dos señoras que en Espejo llamaban “las
barredas” por apellidarse Barredo, y de nombre Encarna y Lucrecia que habitualmente
residían en Vitoria y eran oriundas de Valdegovía, concretamente de Bellogín y
veraneaban en Espejo, siguieron visitando Petrás durante muchos años y se decía
que dieron protección al mozalbete visionario.
Y así se dio fin a la aparición de la Virgen en Petras en el
pueblo de Espejo.
Gracias especiales a mi gran amigo Pedro José Morales Moya que con sus casi 94
años es memoria viva de Espejo y la época en que se desarrollaron estos hechos.
Argazkiak: Euskomedia, Wikipedia